Sector Agrícola: un motor que no se detiene

Agrícolas Santa Filomena y El Carmelo, socios de la Corporación de Empresas del Maipo detallan como viven la crisis sanitaria más grande que ha tenido el país. Nuevas formas de trabajo, implementación de buenas prácticas agrícolas, rotación de turnos, distancia social y capacitación a los trabajadores son algunos de los cambios que ha debido sortear el rubro agrícola para asegurar el abastecimiento de todos los consumidores del país.

Coinciden en que el rubro agrícola ha debido sortear variadas dificultades, desde la crisis social de octubre pasado, hasta la sequía que este 2020 se ha agudizado, sin embargo, la crisis sanitaria a la que se ven enfrentados no tiene precedentes.

El sector agrícola viene lidiando con los efectos del Coronavirus desde principios de año, pues sus exportaciones se vieron afectadas, ya que China es uno de los principales países al que Chile exporta y fue el foco de esta pandemia, es por ello que están viendo como abrir mercados y acelerar otros para hacer llegar sus productos y así no perder la producción.

Visualizar un 2020 no es fácil, como a todos, la incertidumbre es constante y deben lidiar día a día con decisiones difíciles, como saber si invertir o no, o pensar en ser empresas más sustentables en lo económico, social y ambiental ya que no hay claridad de cuanto dure esto en Chile ni en el mundo, por lo que el llamado es a ser cautelosos y responsables.

Hoy se piensa en el día a día, en avanzar, aunque sea poco pero no dejarse paralizar por el miedo, es un escenario difícil, pero trabajando unidos se podrá salir fortalecidos de esto.

Sinceramente esperan que esta crisis saque lo mejor del ser humano, esto marcará un hito no solo en uno de los rubros más importantes del país, sino que también cambiará la forma de vivir, de reflexionar entre lo importante y lo superfluo, de modo de lograr una vida más equilibrada en todo sentido.

Agradecemos a José Miguel Pereira, Sergio Hernández de Agrícola EL Carmelo y Enrique Rodríguez de Agrícola Santa Filomena, por compartir su experiencia, que de seguro ayudará a comprender esta crisis desde otro ángulo.